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INSEGURIDAD Y AUTOESTIMA

 

INSEGURIDAD Y AUTOESTIMA

La Inseguridad es un sentimiento que te hace dudar de ti mismo y de tus habilidades. Se interpone en tu desarrollo social o profesional.

Posibles precipitantes endógenos y exógenos:

 Ser criticado por alguien importante para ti (madre, padre, hermanos, etc.).

 Inseguridad sobre tu futuro.

 Un despido o falta de trabajo.

 Dudas.

 Desear un cambio.

 Falta de experiencia en la vida.

 Falta de información suficiente a la hora de tomar decisiones.

 No conocer tus cualidades y habilidades.

 Miedo a la opinión de los demás.

 Incapacidad o falta de conocimiento en nuestra forma de comenzar una conversación o una relación (no saber cómo hablar con personas del sexo opuesto y ese tipo de cosas).

La mayoría de las veces, la inseguridad está relacionada con las habilidades sociales y la participación en el entorno social. Cuando sientes inseguridad, te cuesta comenzar nuevas actividades, tomar decisiones cuando hay un problema, empezar un nuevo trabajo, acabar un proyecto... Una de las razones para sentirse inseguro en la vida es la presencia de baja autoestima.

¿Por qué la baja Autoestima te hace inseguro?

La autoestima se basa en tus habilidades personales, tus cualidades, tu capacidad de cambiar de actitud en ciertas situaciones, tu capacidad de controlar una determinada situación, las ganas y capacidad de mejorar en el trabajo, etc. Si no eres capaz de valorar tus cualidades y ver lo importante que eres, entonces tienes baja estima.

Normalmente, te vas a sentir inseguro de tus habilidades y vas a tener dificultades cuando te enfrentes a desafíos en la vida porque no eres consciente de que tienes todas las herramientas necesarias para llevar una vida normal.

Los síntomas de la baja autoestima suelen ser más comúnmente la indecisión, innumerables miedos, miedo a dar el primer paso, etc.

También, la baja autoestima puede ser causada por la falta de de motivación, insatisfacción en general, no saber ver las cosas desde otro punto de vista o no conocer tus propias habilidades.

La baja autoestima es la principal fuente de la inseguridad en tu vida. Mientras tengas baja estima, dudaras constantemente de ti mismo y estarás asustado de comenzar cualquier actividad o relación. Este miedo impide que muestres tus habilidades y que organices tu vida según tus propios deseos, necesidades y sueños. Así, por supuesto, te vuelves inseguro y tímido en tu relación con los demás, lo que te hace caer en un círculo vicioso del que aparentemente parece muy difícil salir, pero que es posible. Solo necesitas asumir la iniciativa y permitirte a ti mismo pensar que eres una persona emocional y psicológicamente fuerte.

¿Cómo derrotar a la inseguridad?

Para poder combatir la inseguridad en tu vida necesitas:

·         Conocerte a ti mismo y crear una imagen real sobre ti, tus habilidades y tus capacidades.

·         Encontrar tus propios métodos para incrementar tu confianza.

Esto cambiará tu autoestima, ¡porque todos tenemos cualidades que nos hacen únicos!

Pasos para derrotar la inseguridad

1. ¡Encuentra la fuente de tu inseguridad!

Cuando encuentras la verdadera causa de tu inseguridad, entonces puedes atacarla directamente.

2. Cree en tu “fuerza interior” a pesar de las dudas, miedo al fracaso y al dolor que supones que vas a sentir.

Dudas, miedo al fracaso y dolor emocional son emociones humanas naturales cuando te enfrentas a una situación nueva y poco familiar. Ten en cuenta que cualquier cambio provoca una sensación de inseguridad y preguntas del tipo:

·         ¿Lo hago o no lo hago?

·         ¿Es esto para mejor?

·         ¿Seré feliz?

·         ¿Seré capaz de superarlo si fracaso?

Repito: es normal que vengan esas preguntas a tu mente, aunque sea por el instinto que tenemos y con el que nacemos de autoprotección. Pero en tales momentos puedes probar a relajarte, respirar profundamente, y buscar la fuerza en tu interior.

 ¡Tienes que tener bien claro que posees el poder psicológico y emocional para superar tu inseguridad!

3. Piensa en las consecuencias, pero no dejes que eso te absorba.

Las consecuencias de tus acciones son inevitables y es mejor saber que siempre las habrá, pero considera el hecho de que si te sientas a esperar a

que las cosas ocurran por si solas y te cruzas de brazos por miedo a las “consecuencias”, te perderás muchos momentos inolvidables.

Siempre habrá consecuencias, lo importante es cómo vas a reaccionar ante ellas. Siempre puedes suponer que habrán por ejemplo 5 consecuencias de una de tus acciones, pero cuando la realices ¡siempre habrá una sexta consecuencia que te tomara por sorpresa! ¿Y entonces qué pasa? ¡NADA!, pero ya habrás dado el paso más importante: Superar la inseguridad habiendo tomado acción. Y la consecuencia número 6 será la prueba de tu fortaleza espiritual.

4. Tu inseguridad cobra sentido.

La inseguridad impide tu desarrollo, aunque también puede provocar que tomes acciones, ¡en tus manos esta elegir cuál de las dos prefieres que sea el conductor en tu vida!

Tu inseguridad cobrara sentido en la medida en que te ayude a ser consciente de tus errores actuales y corregirlos para que no te causen daño en el futuro. La inseguridad puede motivarte a tomar acción ayudándote de este modo a realizar cambios en tu vida con más cuidado y concentración.

5. La actividad física ayuda a sobrellevar la inseguridad.

La inseguridad disminuye tu actividad y motivación, crea miedo y dudas sobre tus habilidades. Te hace pensar que sentarse y no hacer nada es más fácil que hacer cualquier otra cosa, pero si lo que quieres es superar esa inseguridad tienes que mirar “cara a cara” a tus miedos y dudas. Tienes que demostrarte a ti mismo que eres capaz de alcanzar tus metas.

La mejor manera de construir tu personalidad y carácter, de aprender a ser disciplinado y de aumentar la confianza en ti mismo es a través del deporte. Sin importar el deporte que elijas (elije uno en el que disfrutes como un niño) es importante que seas sistemático y estés motivado con él para enfrentarte a los retos y metas que ese deporte te aporta. Por supuesto, si no eres una persona muy deportista, deberías escoger una meta que te estimule y a la cual te entregues por completo. Disfruta y se, el mejor en ese deporte, tu inseguridad disminuirá notablemente.

Consejos prácticos para aplicar en el día a día

1. ¡Empieza por pensar que eres una persona capaz!

Este ejercicio puede mantenerte motivado, y la motivación hiere a la inseguridad.

En primer lugar, ponte tareas que te sean fáciles de realizar. Lo importante es que te centres en alguna habilidad que no creas tener. Es mejor que tu objetivo lo puedas alcanzar en un plazo de tiempo corto, así podrás ver los resultados antes, luego ponte tareas cada vez más difíciles, que requieran más tiempo, más concentración y dedicación (cada persona debe elegir una actividad en función de sus necesidades actuales, personalidad y motivos de sus miedos).

2. Mira el lado positivo de todo, incluso en una situación desesperada.

Intenta pensar de tal manera que ignores los pensamientos negativos.

Podrías hacerlo así: cuando estés en una situación en la que te vengan dudas e inseguridad, escribe en una página en blanco una descripción de la situación.

Hazlo lo antes posible, si en ese momento no puedes, espera hasta llegar a casa. Puede que te parezca una tarea pesada y poco divertida, pero

simplemente hazlo sin pensarlo.

Luego, evalúa la situación. En la mayoría de los casos esta evaluación se fundamentará en pensamientos negativos. Después de un rato (unos minutos o una hora) escribe un pensamiento positivo a cada pensamiento negativo que hayas descrito. Cuando veas tus pensamientos escritos de esa manera, encontraras que el pensamiento positivo es más útil y provechoso, lo que te ayudará a acabar con el miedo y la inseguridad. El pensar positivamente te da una razón para actuar y ambición para alcanzar tus metas.

3. Piensa en las alternativas. Un problema tiene muchas soluciones.

Intenta no frenar tus pensamientos aceptando la primera solución a un problema que te viene a la cabeza. Mira el problema desde tantos puntos de vista como puedas, coméntalo con algún amigo, familiar o alguien de confianza para ti, cuantas más opiniones mejor. Así tu problema se verá cada vez más pequeño y podrás elegir la forma más apropiada de resolverlo.

4. Se útil para los demás.

Cuando ayudas a otros a solucionar sus problemas ganas más auto confianza.

El sentir que eres útil para alguien más inevitablemente te ayuda a superar tu inseguridad. Una buena disposición y buena actitud con otras personas te ayudara a entender que eres una persona que tiene algo que ofrecer al resto.

5. Sonríe tanto como puedas.

La sonrisa es la manifestación física de la alegría y la felicidad. Mientras sonríes te cargas de energía positiva, lo cual te da más confianza. La gente que te vea probablemente responderá de igual forma a tu sonrisa y ello te hará sentir aún mejor.

La inseguridad es un sentimiento normal para todos. Todos tienen momentos en los que dudan ser capaces de hacer una u otra cosa. Pero la sensación de inseguridad no debe transformarse en el centro de tu vida, no debes permitir que sea eso lo que guíe tus pasos. Mira dentro de ti y te darás cuenta de que eres tú quien tiene la fuerza suficiente para sacar la inseguridad de tu propia vida.

Bibliografía

Berntsson, E. A. (s.f.). Claves para una autoestima indestructible.

 

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