MODELO PROCESUAL DEL ESTRÉS (Sandín, 2008)
El estrés implica un conjunto complejo de variables que funcionan a diferentes niveles y que interaccionan entre sí diacrónicamente.
Se estructura sobre la base de 7 etapas:
1. Demandas psicosociales- comúnmente “estrés psicosocial”-.
2. Evaluación cognitiva
a) Tipo de amenazas: pérdida, peligro/daño, desafío.
b) Características de la demanda: Valencia, independencia, predecibilidad, controlabilidad
3. Respuesta de estrés
4. Afrontamiento
5. Características personales
6. Apoyo social, nivel socioeconómico, redes sociales
7. Estatus de salud
1. Demandas psicosociales
Se refiere a los agentes externos causales del estrés. Incluye:
1) Factores psicosociales:
El bajo estatus socioeconómico actúa como factor desencadenante de más estresores psicosociales, peor apoyo social y características personales negativas.
2) Factores naturales -frío, calor...-
3) Factores artificiales -ruido, contaminación...-
Se trata de la 1º fase del modelo procesual
Se centra en los agentes externos psicosociales estresantes. Se entiende que los acontecimientos estresantes constituyen el estrés, los cuales producen alteración -strain- en el funcionamiento psicológico y somático del organismo.
Tipos de demandas psicosociales o estrés psicosocial:
A) Sucesos vitales
La cuantificación del estrés se lleva a cabo a través de la medida de sucesos vitales que pueden evaluarse mediante:
1) La “Escala de Estimación del Reajuste Social (SRRS) (Holmes y Rahe, 1967):
2) La “Escala de Experiencias Vitales” y el Cuestionario de Sucesos Vitales (Sandín)
Registran los sucesos vitales, pero evaluando el impacto diferencial en dimensiones como el nivel de estrés, malestar emocional, control...
A mayor puntuación en UCV, mayor riesgo de desarrollar un trastorno físico o psicológico
Por otro lado, según el enfoque “Role strain”, los sucesos vitales más que generar un cambio en el organismo, producen un cambio en los patrones -circunstancias, pensamientos...- en curso de la vida de la gente. El Role strain es definido como dificultades o problemas de la vida en curso -económicos, maritales...-. Este modelo entiende que los sucesos actúan sobre la salud a través de los problemas o dificultades, no de forma directa.
B) Sucesos menores (estrés diario)
Tanto el estrés menor – de menor impacto, pero más frecuentes- como las satisfacciones que caracterizan la vida cotidiana poseen mayor significado para la salud que los sucesos vitales (Lázarus y cols)
Estos autores definieron dos tipos de eventos:
1) Hassles: Demandas irritantes, frustrantes, estresantes -malestar emocional-. Que caracterizan nuestras transacciones cotidianas con el medio. Incluyen:
2) Uplifts: Placeres, satisfacciones
Actualmente lo que más se ajusta a la realidad y con más evidencia a favor es que sucesos vitales y estrés diario contribuyen de forma interactiva:
Los sucesos vitales pueden inducir nuevos sucesos diarios, en tal circunstancia, éstos últimos actuarían como agentes mediadores entre los sucesos vitales y respuestas de estrés del organismo, por lo que no tiene sentido decir que los sucesos diarios sean más o menos importantes que los sucesos vitales.
2. Evaluación cognitiva
El control percibido reduce las respuestas de estrés, al menos por la actuación de dos mecanismos implicados:
Por tanto, el control percibido puede ser un mediador importante para la respuesta de estrés, siendo más importante el control percibido -ilusión de control- que el real. Cuando el sujeto percibe los sucesos como negativos, impredecibles, independientes, incontrolables, indeseables suelen perturbar la salud.
Además de la valoración o percepción que hace el sujeto, también el tipo de situación puede ser determinante. Más bien, existe una interacción entre ambas, siendo menos manifiesta la influencia de la valoración/percepción cuando la imposición ambiental es mayor, y viceversa. Es decir, aunque el individuo puede evaluar cada elemento situacional, también la situación -pérdida de un amigo- puede condicionar determinadas formas de evaluación cognitiva -la persona la percibe como incontrolable-.
3. Respuesta de estrés
A) Fisiológicas
Sobre todo, del sistema neuroendocrino -liberación de catecolaminas y cortisol fundamentalmente- y del SNA -activación simpática e inhibición parasimpática-.
TIPO DE RESPUESTA/ÓRGANO | TIPO DE EFECTO |
Cardiovascular | Incremento tasa cardíaca Aumento presión sanguínea sistólica y diastólica Aumento output cardíaco Vasocontricción periférica Posibles arritmias cardíacas |
Otras respuestas psicofisiológicas | Incremento tensión muscular general Temblor Incremento tasa respiratoria Hiperventilación Incremento sudoración Incremento actividad electrodermal Incremento dilatación pupilar Reducción tensión muscular intestinal Reducción de la salivación Reducción amplitud ondas EEG Reducción ph piel/saliva |
Respuestas metabólicas | Liberación de glucosa Incremento en producción de glucosa Catabolismo proteico Aumento ácidos grasos libres (mayor liberación de ácidos grasos a la sangre) Aumento del colesterol plasmático Aumento de triglicéridos plasmáticos Incremento del transporte de oxígeno |
Estómago | Incremento secreciones gástricas |
Bronquios | Dilatación |
Timo y sistema inmune | Involución tímica y reducción de la competencia inmunológica |
Tiroides | Incremento tamaño/actividad |
Suprarrenales | Incremento tamaño/actividad |
Glándulas sexuales | Reducción tamaño/actividad |
Hígado | Involución |
Páncreas | Involución |
Riñón | Degeneración |
B) Psicológicas
Son fundamentalmente de tipo emocional y generalmente, ansiedad y/o depresión.
El estrés surge cuando el organismo lleva a cabo un sobreesfuerzo para contrarrestar el desequilibrio inducido por alguna amenaza que altera el normal funcionamiento. La reacción del organismo bajo estrés tiene la finalidad de restaurar su funcionamiento normal que incluye frecuentemente acciones dirigidas a una meta. De este modo, la emoción es elicitada junto a cambios fisiológicos que caracterizan el síndrome de estrés.
El fenómeno que suele ser común en la respuesta de estrés es la sensación subjetiva de malestar emocional -distres o tensión-. Y las emociones que suelen acompañar a la experiencia de estrés son ansiedad, miedo, ira, depresión...El que exista una u otra depende de las circunstancias del individuo y de la situación -valoración de la amenaza, estrategias de afrontamiento empleadas...-
Los componentes emocionales asociados al estrés también pueden variar en función de la dimensión aguda/crónica:
Esto se ha explicado en términos de agotamiento en los mecanismos neurotransmisores del SNC por haber ocurrido un estado sostenido de activación neurofisiológica durante el estrés prolongado. Esto explicaría el paso de un síndrome de ansiedad a un cuadro de tipo depresivo.
Otras respuestas son de tipo cognitivo y conductuales. Sin embargo, éstas suelen constituir modos de afrontamiento; además, ciertas respuestas cognitivas consisten en formas de valoración de la amenaza. Por otra parte, la emoción posee también componentes cognitivos y conductuales, además de la propia experiencia emocional.
4. Afrontamiento
El afrontamiento, actualmente se entiende como los esfuerzos, tanto cognitivos como conductuales que hace el individuo para hacer frente al estrés. Existe suficiente consenso en apoyar que juega un papel importante como componente mediador entre las circunstancias estresantes y la salud. El desarrollo teórico y metodológico del concepto afrontamiento puede agruparse en 2 aproximaciones:
El afrontamiento como estilo personal
1. Modelo del represor/sensibilizador (Byrne, 1964)
El represor tiende a la negación y evitación. Informan que experimentan baja ansiedad ante situaciones de estrés, sin embargo, emiten elevadas respuestas fisiológicas.
El sensibilizador es más vigilante y expansivo. Informan de mayor grado de ansiedad que el reflejado en las respuestas fisiológicas.
Se ha sugerido que ambos utilizan códigos defensivos opuestos, los represores niegan psicológicamente la ansiedad y los sensibilizadores la incrementan. Ambos responden al estrés de forma estereotipada, es decir, reaccionan con excesiva frecuencia empleando códigos defensivos.
La estrategia defensiva de los individuos al estrés es un constructo unidimensional de afrontamiento:
En un extremo se encuentran las personas altamente sensibilizadoras, y en el otro, los muy represoras.
2. Tipos de afrontamiento al estrés (Weinberger y cols).
Basados en las respuestas fisiológicas a estresores:
1) Represor. Alta deseabilidad social (DS) y baja ansiedad (A)
2) No defensivo/No ansioso. Baja DS y A
3) No defensivo/Ansioso. Baja DS y alta A
4) Defensividad ansiosa. Alta DS y A
Los tipos represor y defensividad ansiosa exhiben puntuaciones elevadas en DS que no correlacionan con el autoinforme de ansiedad.
3. Modelo monitoring y blunting (Miller, 1987)
Se basa en el modo en que los sujetos cognitivamente procesan la informaciónrelacionada con sucesos aversivos para reducir las reacciones de estrés concominantes.
Monitoring (incrementador): Grado con que un individuo está alerta y sensibilizado respecto a la información. Tienden a valora como amenazantes las situaciones ambiguas, atienden más a las situaciones negativas pudiendo influir en el proceso de evaluación cognitiva.
Blunting (atenuador): Grado en que evita o transforma cognitivamente la información. Ayuda al individuo a atenuar el impacto psicológico.
Ambos pueden ser más o menos adaptativos en función del tipo de situación estresante:
Bajo incrementador y alto atenuador. Es efectivo ante situaciones incontrolables o ante frustración aversiva por demora de la gratificación.
Alto incrementador y bajo atenuador. Es efectivo cuando el contexto permite un mayor control de la amenaza. La información a la que está alerta y sensibilizado, le permite regular su conducta, sin embargo, si la persona ignora la información y tiende a distraerse (evita la información) se encuentra desmotivado para adoptar acciones adaptativas.
4. Kolhmann (1993)
Propone 4 patrones de afrontamiento:
1) Modo vigilante rígido.
2) Modo evitador rígido.
3) Modo flexible.
4) Modo inconsciente
El afrontamiento como proceso (Lazarus)
El afrontamiento como proceso es definido como los esfuerzos en curso cognitivos y conductuales para manejar las demandas externas e internas evaluadas como algo que agrava o excede los recursos de la persona, es decir, consiste en los esfuerzos cognitivos y conductuales para manejar el estrés psicológico.
Implica asumir los siguientes principios:
1) El afrontamiento debe separarse de los resultados (puede ser adaptativo o no)
2) El afrontamiento depende del contexto, varía en función de la significación adaptativa y los requerimientos de otras amenazas.
3) Unas estrategias son más estables o consistentes que otras. Son más estables las de reevaluación positiva que las de búsqueda de apoyo social.
4) Al menos existen dos funciones principales del afrontamiento:
a) Focalizado en el problema. Es cambiar la relación ambiente-persona actuando sobre el ambiente o sobre sí mismo. Se trata de manejar o alterar la fuente generadora de estrés.
b) Focalizada en la emoción. Es cambiar el modo en que se trata o interpreta lo que está ocurriendo. Ambas formas de afrontamiento pueden facilitarse o interferirse mutuamente.
El afrontamiento depende de la evaluación respecto a que puede hacerse algo o no para cambiar la situación. Si la evaluación dice que es controlable, predomina la focalización en el problema, si no, en la focalización de la emoción.
Dimensiones del afrontamiento del WCQ (Ways Of Coping Cuestionaire).
Respecto al afrontamiento focalizado en el problema:
Confrontación
Planificación de solución de problemas
Respecto al afrontamiento en la emoción:
Distanciamiento
Autocontrol
Aceptación de la responsabilidad
Escape-evitación
Revaloración positiva
Modalidad de afrontamiento intermedia:
Búsqueda de apoyo social
La ansiedad y depresión se ha relacionado positivamente con el uso de estrategias focalizadas en la emoción, y negativamente con estrategias focalizadas en el problema.
Aun asumiendo que la eficacia adaptativa del afrontamiento puede variar en función del contexto, algunas estrategias como la planificación de solución de problemas y la reevaluación positiva suelen asociarse a resultados positivos y la confrontación y el aislamiento con resultados negativos. El resto de estrategias ofrecen datos menos discriminativos quizás porque varían más en relación a las demandas del contexto y al tipo de transacción.
5. Características personales
Las variables personales de predisposición al estrés son un conjunto de variables de características personales de tipo disposicional y rasgos de personalidad (relativamente estables) que modulan las reacciones del individuo a las situaciones estresantes, las cuales, explican las diferencias individuales en las reacciones de estrés.
Tipos de conexión entre las variables de personalidad y los trastornos asociados al estrés:
1) La personalidad puede influir sobre la salud a través de mecanismos fisiológicos directos (p.ej., reactividad cardiovascular...) y/o indirectos (p.ej., modulación del sistema inmune...)
2) Las características de personalidad pueden potenciar la enfermedad al motivar conductas no saludables (p.ej., consumo de alcohol excesivo...)
3) Ciertos aspectos de personalidad pueden aparecer como resultado de procesos asociados a la enfermedad (p.ej., dependencia)
Las variables disposicionales moduladoras de la relación entre el estrés y personalidad son múltiples y diversas:
Potenciadoras de la salud:
Hardiness (dureza, resistencia)
Optimismo
Sentido del humor
Motivación de sociabilidad
Autoestima
Sentido de coherencia
Facilitadoras de la enfermedad:
Hostilidad
Cinismo
Antagonismo
Alexitimia
Reactividad al estrés
Estilo represor
Motivación de logro
La extroversión y neuroticismo se han asociado al cáncer y otros trastornos de forma más indirecta. Por ejemplo, el neuroticismo es un factor que facilita las conductas de hostilidad, ira, sintomatología somática.
La alexitimia.
1) Dificultad para identificar emociones
2) Dificultad para comunicar emociones
3) Reducción de ensueños y fantasías
4) Pensamiento orientado externamente
Hardiness
a) Compromiso. Habilidad para creen en y reconocer los propios valores, metas, prioridades; apreciar la propia capacidad y lo que uno hace; y la tendencia a implicarse uno mismo en las diferentes situaciones vitales con un sentido general de propósito. Las personas comprometidas minimizan la percepción de amenaza con sus creencias. Se trata de un compromiso con uno mismo, idea no alejada del existencialismo.
b) Desafío. Tendencia a valorar las situaciones de estrés como un desafío. Es más saludable que hacerlo como amenaza. El desafío es como una oportunidad y un incentivo para el desarrollo personal. Suelen o efectúan este tipo de valoración individuos cognitivamente flexibles y con buena tolerancia a la ambigüedad.
c) Control. La sensación personal de control sobre los eventos externos facilita la adaptación ante las situaciones estresantes y la salud. Las personas con elevada percepción de control no sólo buscan explicaciones sobre lo que ocurre en términos de acciones de otros o en el destino, también, y de forma especial, en la propia responsabilidad.
Sentido de coherencia
Disposición estable de personalidad que funciona a modo de recurso principalmente de afrontamiento para preservar la salud, como un recurso de resistencia al estrés.
Se ha asociado a la salud física y mental.
Presenta componentes de otros constructos como la resistencia ante el estrés, autoeficacia y autoestima.
Se trata de una orientación global del individuo caracterizada por 3 componentes:
a) Comprensibilidad. Control cognitivo sobre el propio medio que rodea al sujeto. Este es interpretado como algo racional, comprensible, estructrurado, ordenado, consistente y predecible.
b) Manejabilidad. Indica el grado en que el individuo considera que dispone de recursos para hacer frente adecuadamente a las demandas o problemas.
c) Significatividad. Componente motivacional. Determina si una situación es o no evaluada como un reto, y si merece la pena implicarse tratando de afrontarlo
Niveles sobre los que pueden actuar las variables disposicionales
Evaluación cognitiva
Estrategias de afrontamiento
Respuestas fisiológicas
Respuestas emocionales
1) Las personas neuróticas valoran las situaciones estresantes de forma más amenazante. Emiten respuestas fisiológicas y emocionales en mayor grado.
2) Personas con elevada hostilidad, ante el estrés, tienden a experimentar ira y elevada reactividad.
3) Individuos con estilo represor presentan inhibición de la competencia inmunológica asociada al estrés (puede deberse a un exceso de glucocorticoides inducidos por estrés).
4) El neuroticismo está asociado positivamente con uso de estrategias de afrontamiento focalizadas en la emoción. P. ej., autoculpa, autoaislamiento, descarga emocional, fantasía...; y negativamente con estrategias focalizadas en la situación. La probabilidad de un individuo de utilizar una u otra estrategia depende de factores situacionales y de características personales.
5) Características más o menos estables como optimismo, autoestima, locus de control interno, hardiness, se han asociado positivamente al uso de estrategias focalizadas en el problema (acciones planificadas) en situaciones potencialmente controlables, y a tendencias a llevar a cabo mayor número de acciones para aliviar sus síntomas al estar enfermos.
Otros niveles sobre los que pueden actuar las variables de personalidad
Entre las variables de personalidad y el uso de estrategias de afrontamiento, existen estilos o tendencias personales (rasgos) que predisponen al uso de uno u otros modos de afrontamiento, por tanto, existe un solapamiento entre los conceptos de afrontamiento y factores de predisposición (variables disposicionales).
a) Las variables de personalidad relacionadas con los sucesos vitales y con el estrés diario (sucesos menores)
Los sucesos vitales categorizados como dependientes (matrimonio...) pueden depender en gran medida de características personales.
El estrés diario no sólo depende en gran medida de características personales sino también del grado actual de salud y de rasgos personales.
El autoinforme de estrés diario correlaciona positivamente con la predisposición hacia la afectividad negativa.
b) Las variables personales pueden modular el apoyo social (real o percibido)
Se trata del grado en que el individuo se relaciona y se ha medido a través de indicadores como aislamiento, integración en grupos...
Se han constatado relaciones positivas entre extraversión y tamaño de la red social o disponibilidad de apoyo.
Por otra parte, el apoyo social se relaciona con habilidades interpersonales, la deficiencia de habilidades sociales puede llevar a una excesiva demanda de apoyo, es decir, a un exceso de dependencia, y en última instancia, a un empobrecimiento y perturbación de las redes de apoyo disponibles. La relación entre personalidad y apoyo social es recíproca.
c) Diversas variables disposicionales asociadas al estrés pueden interrelacionarse entre sí (Schubroeck y Ganster, 1991)
Por ejemplo, la afectividad negativa puede asociarse a variables que se han relacionado positivamente con el desarrollo de trastornos psicosomáticos.
6. Apoyo social
Constituyen los recursos sociales para el afrontamiento
Implica la presencia y el producto de relaciones humanas estables
Debe incluir varios elementos primarios (Payne y Jones):
1) Dirección. Según sea dado o recibido o ambos
2) Disposición. Disponibilidad en cantidad y calidad, y utilidad real de los recursos.
3) Descripción/evaluación. ¿Pueden ser descritos o evaluados, la naturaleza y cualidad del apoyo social?
4) Contenido. Emocional, instrumental, informativo o valorativo.
5) Redes sociales que constituyen la fuente de apoyo (familia, amigos íntimos, vecinos...
Desde el punto de vista de su relación con la salud, la evaluación del apoyo social percibido es más relevante que el del apoyo real.
Bibliografía
Belloch, A., Sandín, B., & Ramos, F. (2011). Manual de psicopatología. Volumen II. Madrid: McGrawHill.
Comentarios
Publicar un comentario